Hasta la fecha no se conocen casos de infección de animales (mascotas o animales salvajes) en Europa, pero teniendo en cuenta el carácter zoonótico de la enfermedad, Fesvet recomienda precaución.
El significado de esta declaración es que, según la OMS, el brote representa una amenaza lo suficientemente importante para la salud mundial, que se necesita una respuesta internacional coordinada para evitar que el virus se propague más y se convierta potencialmente en una pandemia.
En la actualidad el brote supera los 16.000 casos declarados y está distribuida la enfermedad en más de 70 países, dejando por el momento cinco muertos. Según sus declaraciones, a nivel mundial el riesgo aun se considera moderado, salvo en Europa donde el riesgo es considerado alto, siendo el actual epicentro del brote y donde se concentra el 80 % de los casos.
España es el país con mayor número de casos. A fecha de 22 de julio hay 3.125 casos, seguido de EEUU, Alemania, Reino Unido y Francia.
Madrid encabeza el número de casos con 1.577 casos a fecha 20 de julio, siendo el último de los casos confirmados el de un bebé de 7 meses que adquirió la enfermedad en el hogar. El brote más reciente ha sido detectado en San Fernando, Cádiz con un total de 12 casos que han sido relacionados con un centro de tatuajes.
En fechas recientes y cuando en España contaba con no mas de 30 casos, desde Fesvet hicieron un “llamamiento a la lucha coordinada y donde se tuviera en cuenta la aportación que desde la profesión veterinaria se podría realizar en la lucha contra la que se vislumbra como nueva pandemia”.
Por el momento, la vía de transmisión fundamental está siendo la transmisión persona-persona, a través de fluidos, secreciones y objetos contaminados. Las prácticas sexuales de riesgo entre varones parecen que están siendo un factor importante en la transmisión.
RECOMENDACIONES PARA MASCOTAS
Hasta la fecha no se conocen casos de infección de animales (mascotas o animales salvajes) en Europa, pero teniendo en cuenta el carácter zoonótico de la enfermedad, desde la Federación Estatal de Sindicatos Veterinarios (Fesvet) recomiendan atender a las recomendaciones ofrecidas por la OMS y el Ministerio de Sanidad.
“Las personas infectadas con la viruela del mono deben evitar todo contacto con mamíferos domésticos, en particular con roedores (ratones, ratas, hámsters, gerbos, cobayas, ardillas, etc.), debido a la posibilidad de transmisión persona animal durante un periodo equivalente al periodo máximo de transmisibilidad del virus, es decir, desde el inicio de síntomas hasta la desaparición completa de los síntomas y de las lesiones cutáneas, así como notificar el contacto con o tenencia de este tipo de roedores a los servicios de salud pública por parte de los afectados”, indican.
Asimismo, “las personas que sean clasificadas como contactos estrechos de casos confirmados, deben minimizar el contacto con mascotas y animales silvestres y adoptar todas las posibles medidas de precaución para evitar posibles transmisiones”.
De igual modo, recomiendan lavarse las manos antes y después de interactuar con las mascotas, así como llevar mascarilla durante la estancia en las áreas compartidas dentro del domicilio afectado y mantener un alto nivel de higiene general en el hogar con limpieza frecuente de superficies y suelos.
“Los animales que hayan estado en contacto estrecho con casos humanos confirmados, deberán permanecer en aislamiento durante el periodo máximo de incubación de la enfermedad, que está descrito para humanos (en todos los casos, durante un período mínimo de 21 días), a contar desde su último contacto”, advierten.
Por otra parte, piden evitar contacto sin protección con animales salvajes (incluida su carne, sangre y otras partes), especialmente aquellos que están enfermos o muertos. “Además, todos los alimentos que contengan carne o partes de animales deben cocinarse bien antes de consumirlos”.
Por último, señalan que los animales en cautividad presuntamente infectados, “deberán aislarse de otros animales y ponerse en cuarentena con efecto inmediato. Cualquier animal que pueda haber estado en contacto con un animal infectado debe ser puesto en cuarentena, manipulado con las precauciones habituales y observado para detectar síntomas de viruela símica durante 30 días”.
Fuente: DiarioVeterinario.com