Mientras el Gobierno todavía no publicó la resolución que debería ordenar el uso de medios mecánicos para la descarga de la media res, los exportadores de carne vacuna insistieron en pedir un cambio en el sistema de comercialización de los cortes.
A raíz también del fallecimiento de dos personas en el partido bonaerense de Berazategui por, supuestamente, haber ingerido achuras en mal estado, el Consorcio Argentino de Exportadores de Carnes (ABC, en sus siglas en inglés), que agrupa a la mayoría de los frigoríficos que comercializan con el exterior, expresó que “es imperativo evolucionar a un sistema de producción y comercialización de carne bovina eficiente, con garantías de inocuidad, trazabilidad y sustentabilidad”.
Para el ABC, “la persistencia a la petición de la implementación del troceo de la carne como primer paso hacia la comercialización en cortes se hace cada vez más fuerte. Precisamente porque la distribución de medias reses ‘desnudas’ favorece la contaminación del producto por contacto con superficies que no son seguras”.
En el comunicado, los exportadores explicaron que el transporte de trozos protegidos “garantiza las buenas prácticas de manufactura durante el troceo de las reses en el frigorífico y permite asegurar la cadena de frío desde el frigorífico (7ºC) a la carnicería, tal como lo establece Senasa y el Código Alimentario Argentino”.
El ABC, para argumentar su reclamo, sostuvo que “actualmente sería impensado comprar leche sin un envase y un rótulo, en el cual se identifiquen las fechas de elaboración y vencimiento, y la temperatura de conservación, entre otra información. Lo mismo debe suceder con toda la carne. De este modo todos los consumidores podrán acceder a la información sobre el producto, tal y como sucede al comprar un corte envasado al vacío”.
Los exportadores se lamentaron de que el problema del control al riesgo de contaminación en productos cárnicos no sea nuevo. “Sin embargo, este problema se intensifica cada día y plantea serias dudas en cuanto a la seguridad alimentaria y la calidad sanitaria del producto final”, dijeron.
La investigación preliminar de las autoridades sanitarias del gobierno de la provincia de Buenos Aires arrojó como resultado que cuatro personas fueron internadas en Berazategui por padecer diarrea aguda provocada por bacterias patógenas y que coincidieron en relatar que habían ingerido achuras y carne. Dos de ellas fallecieron.
Los exportadores expresaron que buscan “mejorar las prácticas de saneamiento en la industria frigorífica e informar al público sobre el riesgo de comprar carne que no cumpla con procedimientos de calidad”.
Por otra parte, el Centro Argentino de Ingenieros Agrónomos (Cadia) expresó en un documento que un nuevo sistema de comercialización de carne debe “contemplar costos y beneficios: la salud de los trabajadores, la sanidad de la carne que llega al consumo y el costo de la medida que no afecte el poder adquisitivo de la población”
Además, enfatizaron que “la modernización del comercio de la carne vacuna es necesaria e irreversible” y que “el camino a seguir deberá ser respetando las particularidades que existen en el comercio minorista de la carne”.
Fuente: La Nación - Campo