Tamberos de varias zonas productivas del país se juntaron para compartir experiencias y conocimiento sobre esta tecnología.
El sistema de ordeñe robotizado ya es una realidad en la Argentina por sus bondades en la producción de leche. Si bien no se ha expandido en masividad, viene creciendo en los últimos años en los tambos argentinos. Y a partir de este auge, los productores decidieron armar un nuevo grupo Crea en conjunto con directivos de la organización.
“Al grupo se lo impulsó desde el área de Innovación porque identificamos una necesidad. Es una tecnología que, si bien hay varios tambos con un robot de ordeñe, no se ha masificado. Por ahí, en algún grupo lechero Crea había un productor que estaba incorporando el robot de ordeñe, entonces en el seno de su grupo, no tenía con quién interactuar”, explicó Gabriel Tinghitella, responsable de Innovación de la Unidad de Investigación y Desarrollo de Crea, sobre el comienzo de este nuevo grupo que se inició en febrero de este año. “Mirando todos los grupos Crea, ya había productores que utilizaban esta tecnología. Entonces surgió la idea de juntar a todos”, agregó.
Tinghitella destacó el rol de los productores a la hora de producir, y sobre todo, innovar. “Gente que es inquieta, que siempre busca cómo mejorar el sistema de producción, y cómo lograr mayores rindes, en este caso, litros de leche. Pero también cómo aumentar el bienestar animal yendo a un sistema de producción más sustentable”, destacó sobre los puntos que motivaron el armado de este grupo.
A su vez, recalcó que también tiene mucho que ver que productores se adelantan al problema de la falta de mano de obra en el campo porque cada vez menos gente quiere trabajar en el campo y el tambo es una actividad muy sacrificada.
En el grupo -que se denomina Adoptantes Robots de Ordeño- hay 9 empresas de cinco regiones diferentes del país con un total de 53 robots en funcionamiento. Y 4 empresas están por sumarse al grupo, con 14 robots más.
Este año, el grupo, que tiene como asesor a Pedro Mazziotti, hicieron dos reuniones presenciales y el resto fueron por zoom. Y este año ya acordaron de hacer tres reuniones presenciales.
En el grupo hay 24 robots funcionando en sistemas de compost (4 empresas); 13 robots en cama fría (2 empresas); 6 robots en free stall (1 empresa); 6 robots en pastoril (1 empresa); y 4 robots en dry lot (1 empresa).
Aproximadamente, entre todos los productores tienen 2.900 vacas en ordeñe (340 por empresa en promedio) y en octubre el grupo produjo 3,2 millones de litros, lo que da una media de 38 litros por vaca.
“Lo que más nos llamó la atención en el grupo es cómo funcionan los robots en los distintos sistemas de producción. Los robots tienen una versatilidad para adaptarse a todos sistemas que tenemos acá en Argentina”, comenzó explicando Rodolfo Montechiari, quien tiene un tambo robotizado en Monte Maíz y a su vez es el presidente del grupo que se formalizará en Crea a partir del año que viene.
En este sentido, remarcó que los beneficios más grande que están viendo con el sistema de robots es el control y el tratamiento precoz de los animales ante las enfermedades. “Estamos detectando con mucha anterioridad cuando la vaca se va a enfermar, eso nos hace tener un descarte muy bajo de animales”, aseguró.
Rodolfo Montechiari es el gerente general de la firma familiar que tiene base en la localidad cordobesa de Monte Maíz. La empresa pasó de un sistema pastoril a uno confinado con una dieta acorde y apostando al bienestar del animal y a la robotización del ordeñe. Y llegan con productos elaborados a supermercados de Córdoba desde su fábrica.
Según destacó, uno de los objetivos del grupo para lo que viene es tener charlas de innovación con diferentes actores en el mercado local e internacional y que estén desarrollando nuevas tecnologías para la parte de tambo. “Somos empresas que hemos innovado con la parte de robots, pero también queremos pensar la innovación para otras cosas”, precisó.
Fuente: Esteban Fuentes - Clarin.com